Por Ernesto Intriago
El presente texto intenta dar una mirada en el tema de la
violencia de género publicada en los medios de comunicación del Ecuador. Antes
de centrarnos en la cobertura (para lo que he tomado una pequeñísima muestra),
daremos un breve repaso por el deporte en los medios de comunicación, donde
jamás falta en sus titulares un hecho de muerte, es más, el lecho de muerte
resulta ser un lugar común de los massmedia,
donde nos enteramos que el mundo actual vive (¿sufre?) violencia; entre
países, de género, en la política, en los negocios, en el deporte, aunque es
una perogrullada que el deporte es un negocio, hay que separarlos en este caso.
El sistema mundo actual es violento y léxico en el quehacer del periodismo deportivo
no escapa de aquello.
Uno de los lenguajes más violentos del periodismo es el utilizado
en el deporte, se escucha por radio y televisión, se lee en los periódicos y en
el ciberespacio un lenguaje bélico; aún estando por todos lados, en el
periodismo radiofónico es más común escuchar este tipo de lenguaje. La lógica del periodismo deportivo es la
guerra, las armas, en fin, el militarismo; es tan aceptado que las audiencias
re(a)ceptan el contenido, es tan natural… lo anormal sería narrar un partido de
fútbol sin decir que los equipos se van hacer daño.
Hay otras formas de abordaje, otras metáforas no
guerreras, lo que no quiere decir que requieran menos atención, éstas podría
decirse son “sublimes e inofensivas”, por denominarlas de alguna manera, aunque
en el análisis no lo son para nada. El lenguaje erótico, sexista, la
mujer-objeto (cosificación) como recurso narrativo es común leerlo.
El eros y el thanatos, el amor y la muerte se
expresan en la cancha. En el subcódigo erótico el gol como un coito, es un
ascenso repentino que desemboca en un clímax explosivo. El balón “besa la red”,
“acaricia las manos del portero”; el gol es como una ruptura del himen, la
portería que no ha sido vencida “permanece virgen y “el primer gol es como el
primer amor” pues se conserva en el recuerdo para toda la vida. Quien tiene la
posibilidad de ganar “acaricia el triunfo”. “la pelota es como una mujer: vamos
a ver quien la trata mejor” “. El que busca durante todo el partido la pelota y
la mete a la red y hace el gol “se saca la espinita”. Castro y Giraldo (2007)
Amor y muerte, ¿qué quiere decir? ¿quien ama es el que
muere o el que mata? El leguaje deportivo de nuestro país está pensado para
hombres, esto puede, sin temor a equivocarme responder las preguntas, el hombre
ama, muere y mata, por amor, qué duro suena, pero no se puede ser ajeno a que
los medios de comunicación presentan la violencia sin escrúpulos. ¿Puede
afectar la recepción de tanta violencia en la vida privada? El Comité de
Competición de la Real Federación Española de Fútbol, por ejemplo, recomienda a
los protagonistas del deporte “que cuiden todas sus conductas, declaraciones y
actitudes, no solo en eventos deportivos, sino también en su vida privada por
la influencia que puedan tener en los seguidores del deporte”.
Por otra parte, cuando leemos en los medios de
comunicación un hecho de feminicidio, solo la leemos, la noticia dura lo que
podemos recordar de ella al siguiente día o a la siguiente hora. Para los
medios, los asesinatos de mujeres son noticia de un solo día, al contrario de
la política o el deporte, la cobertura es amplísima; cuando la selección de
fútbol del país va a jugar por las eliminatorias la noticia se genera nueve
días antes y consecutivamente se le hace seguimiento hasta el momento del
encuentro, posteriormente una semana más se sigue publicando “novedades”.[1] Es
preocupante que no hay el mismo interés por hechos que en serio requieren un
seguimiento, por ejemplo ¿qué pasa con el agresor cuando es detenido? ¿por qué
no es detenido el agresor cuando las investigaciones demuestran al culpable?
¿al ser sentenciado por qué sale libre a los pocos días?
Obviamente los medios no se movilizan en estos casos y
estas noticias la publican en sub secciones. Diario EL UNIVERSO publica en la
sección “Sucesos” el lunes 23 de octubre
del 2006 “Hombre mata a su mujer por celos”[2].
El tema de los celos pasa a ser un tema de “entretenimiento”[3], otro
titular del medio antes citado dice: “Un hombre celoso mató a su mujer frente a
hijas”[4],
el léxico periodístico asume que la propiedad de la mujer sobre el hombre.
La existencia de un “instituto der propiedad”
me parece insostenible, en primer lugar porque se trata de algo excesivamente
estructurado como para conferirle el carácter de un radical instintivo. En
segundo lugar porque el concepto mismo de instinto está sujeto a numerosas
revisiones y críticas. Mientras tanto parece plausible adscribirle al “sentido
de propiedad” sobre el otro, que comprende el partenaire, el carácter de algo
aprendido (…) el sentido de propiedad existe, como se pone de manifiesto no
solo mediante el análisis de actitudes, sino, de modo vivible a través de la
concreción de éstas, como actitudes de la colectividad, tras el análisis del
lenguaje coloquial. “Mi Amigo”, “mi mujer”, con menos frecuencia “mi hombre”,
son expresiones que contienen, a todas luces, nuestra imposibilidad de ver a
ese amigo, a esa mujer o a ese hombre como tales, por fuera de la “propiedad”
que sobre ellos ejerzo (…) Cuando el sentido de propiedad se proyecta sobre
personas cosifican a éstas, hacen de la relación personal una relación reificada,
sobre la cual puede más el sentido posesivo por el otro que el de donación o el
de mera consideración por la persona. (Castilla 1975 p. 86-87)
Mientras los feminicidios ocurren, sin una ley que
abarque estos hechos de lesa humanidad, los medios de comunicación informan estas
muertes como una noticia más sin llevarlo al plano de la investigación. ¿por
qué ocurre? ¿a qué se debe? ¿qué hace la justicia en estos casos? ¿existen
políticas públicas serias para estos casos?.
Mientras los periodistas (y toda la masa) crean que
patear a una mujer es igual a patear una pelota de fútbol que muere en la red
de lo ignorado, queda en duda un periodismo en función de igualdad, la
violencia de género pasa a segundo plano. Está en segundo plano hasta ahora.
[1] En un seguimiento a los periódicos El
Diario de Portoviejo y El Mercurio de Manta del 4 del al 18 de octubre por
encuentro de la 9na y décima fecha de las Eliminatorias por el Mundial de
Brasil 2014, éstos periódicos no dejaron de publicar lo que acontecía en la
selección del Ecuador.
* http://musicasvisibles.wordpress.com/2014/07/03/el-cuerpo-es-arma-de-lucha-feminista/
No hay comentarios:
Publicar un comentario